La diáspora salvadoreña inauguró un nuevo restaurante en el Centro Histórico de San Salvador llamado «La Espada», afirmando la transformación integral del corazón de la capital, con una visión que combina la seguridad, inversión, cultura y desarrollo social.
«Hermanos de la diáspora salvadoreña están apostando y revitalizando al país. Es importante mencionar que la inversión, más que ser un componente financiero relevante, es lo que han hecho con este destino y la apuesta al país», indicó la directora de la Auditoria del Centro Histórico de San Salvador, Adriana Larín.
El restaurante La Espada se encuentra liderado por salvadoreños nacionalizados en España, quienes decidieron regresar al país para invertir, convirtiendo un inmueble patrimonial en un espacio de desarrollo y empleo.
La inversión de este espacio asciende a los $180,000, generando más de 25 empleos directos, y ayudando a dinamizar la economía local. «La delincuencia nos obligó a dejar el país, pero al ver la mejora en todos los sentidos, en economía, seguridad y oportunidades para invertir, decidimos regresar y abrir este restaurante», expresó el propietario de La Espada, Fernando Osorio.