Tras el fallecimiento de su dueña, “Polar”, un perrito de la comunidad Iberia, Zona 6 del Distrito Capital, quedó solo y en abandono. Vecinos, preocupados por su estado, denunciaron el caso, que fue atendido de inmediato por el alcalde Mario Durán, a través de la Secretaría de la Mujer y Familia de San Salvador.
Al ser encontrado, Polar estaba deshidratado y con signos de desnutrición. Gracias a la rápida intervención municipal, fue trasladado a una clínica veterinaria donde recibió atención médica integral, exámenes, desparasitación y un plan nutricional especial. Todos los gastos fueron cubiertos personalmente por el alcalde.
Pero la historia no termina ahí. Como muestra de sensibilidad y compromiso con el bienestar animal, el alcalde Mario Durán decidió adoptar a Polar, quien ahora formará parte de la gran familia de la Alcaldía de San Salvador Centro.
Polar pasó de la soledad al cariño, y su historia se convierte en un símbolo de amor, empatía y segundas oportunidades.