Un duelo que desparramó dramatismo sobre el Paradise Arena, la Azul playera cayó 7-6 en penaltis ante Omán, luego de empatar 4-4, y quedó a un milagro de seguir con vida en la Copa del Mundo Beach Soccer de la FIFA 2025 que se celebra en Seychelles.
La armada cuscatleca tiró al «cesto de la basura» la mejor chance para firmar su primer triunfo y dejar las posibilidades intactas, pero contrario al juego ante Brasil, ante los asiáticos no solo fue fallón en ataque, sino que fue errático y llegó tarde a coberturas por lo que permitió que un equipo que lució a ratos inferior le terminara derrotando.
Inicialmente, Salvador fue sacudido y despertado con un madrugador gol. Habían pasado apenas 35 segundos cuando Musallam Al Araimi puso el 1-0 tras pintar sobre la arena a Heber Ramos con un amague.
El gol pellizcó el orgullo azul y blanco que en adelante mostraría superioridad en estrategia y fútbol, pero improductivo en ofensiva y eso le impidió irse en ventaja cuando cayó el telón del primer acto.
Rubén Batres desde el penalti falló primero lo que pudo ser el 1-1, luego remató otro balón desviado y en su tercer intento envió la pelota al larguero, hasta que llegó Emerson «La Joya» Cerna con una espectacular chilena que sacudió las redes y que valió para decretar la paridad, a falta de 4:49 minutos.
En el último suspiro de ese acto también estuvo a centímetros Anderson Castro de hacerse con un balón, pero se le escapó y también la oportunidad de celebrar gol y poner en ventaja a la Azul playera.
Reanudadas las acciones, Batres se quitó la mufa y finalmente celebró el 1-2 todavía con poco más de seis minutos en juego del segundo episodio, pero la alegría fue efímera ya que Elmer Robles perdió un balón y obligó a Erick Nájera a cometer penalti, acción que fue aprovechada por Yahya Al Muraiki para el 2-2, con cinco minutos por delante.
En los suspiros finales de la segunda pausa (45 segundos) Anderson Castro volvió a poner arriba a El Salvador 2-3, y luego Frank Velásquez logró el 2-4, pero apenas alcanzó para celebrar ya que Salim Al Oraimi logró el 3-4 y Sami Al Bulishi, con dos minutos por delante puso la pizarra 4-4.
Antes Omán encontrara el soplo de vida, los guerreros de playa habían perdonado ocasiones claras, pero con el marcador igualado nublaron su mente y cayeron en ansiedad, misma que se llevaron hasta los tres minutos del tiempo extra que acabaron siempre 4-4, y obligados a definir en los penaltis.
Desde la pena máxima convirtieron, en su orden, Frank, Tin Ruiz, Ramos, Castro y Melvin Quintero en la primera tanta, pero Omán estuvo fino y tuvieron que irse a la muerte subida.
Cerna abrió la tanda con gol y emparejó Al Bolushi. Llegó el turno para Robles al que se lo comieron los nervios y terminó errando, lo que no perdonó Abdullah Al Sauti para el definitivo 7-6 mortal.