El expresidente brasileño Jair Bolsonaro confirmó que intentó quemar su tobillera electrónica con un soldador durante el arresto domiciliario en su residencia de Brasilia. La confesión fue registrada en video por la Corte Suprema brasileña y difundida por el tribunal poco antes de que Bolsonaro fuera detenido de forma preventiva bajo sospecha de planear una fuga.
La orden de detención preventiva fue emitida por el juez Alexandre de Moraes, quien justificó la medida por un “riesgo de fuga concreto” y una “amenaza al orden público”, en coincidencia con manifestaciones frente a la residencia del ex mandatario. Moraes ha sido sancionado por Estados Unidos bajo la Ley Magnitsky, debido a supuestas detenciones arbitrarias y restricciones a la libertad de expresión en el proceso contra Bolsonaro. Las sanciones incluyen la revocación de su visa y el congelamiento de activos bajo jurisdicción estadounidense, aplicadas también a su esposa, Viviane Barci de Moraes.
Bolsonaro fue trasladado a la sede de la Policía Federal en Brasilia, donde permanecerá en una sala especial equipada con atención médica y vigilancia permanente. La detención preventiva no constituye el inicio de la ejecución de la sentencia de 27 años y tres meses impuesta en septiembre, en la que el Supremo Tribunal Federal consideró a Bolsonaro como líder de una organización que intentó impedir la toma de posesión del presidente Luiz Inácio Lula da Silva tras las elecciones de 2022.
La defensa del ex presidente anunció que presentará un recurso ante la Corte Suprema, cuestionando la legalidad de la detención preventiva y señalando riesgos para la salud de Bolsonaro, quien presenta secuelas de una puñalada sufrida en 2018.
