Lo que comenzó como una noche de esperanza terminó siendo una pesadilla. En un Estadio Cuscatlán repleto de ilusión, El Salvador volvió a tropezar ante Guatemala y dejó escapar, una vez más, el sueño de regresar a una Copa del Mundo.
El marcador final de 1-0 a favor del conjunto guatemalteco no solo significó una derrota más, sino el golpe que deja a la Selecta prácticamente sin opciones. Guatemala, con este resultado, llega a cinco puntos y se mete de lleno en la lucha, quedando a solo uno de Panamá y Surinam.
Durante la primera mitad, la afición acompañó con fe y aliento inquebrantable. Sin embargo, en la segunda parte el equipo se apagó. La falta de contundencia, los errores en la marca y la ausencia de carácter en los momentos decisivos sellaron un resultado que duele más allá del marcador.
El ambiente al final fue de frustración y repudio. Los abucheos se mezclaron con la tristeza en las gradas, reflejando el sentimiento de un país que volvió a creer… solo para ver cómo el sueño mundialista se desmoronaba una vez más.
El Salvador queda rezagado, con la esperanza hecha pedazos y la certeza amarga de que, en esta eliminatoria, la ilusión volvió a perder contra la realidad.